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Pepe volvió a perder el control. El central del Real Madrid debió ser expulsado por el colegiado Martínez Munuera por una entrada brutal, clavando los tacos en la rodilla de Duda. Pero la acción no fue sancionada. Quien sí se ganó la amarilla fue el centrocampista del Málaga, quien protestaba mostrando su herida al colegiado.
Era el minuto 14 de la segunda parte y el equipo de Ancelotti seguía ganando por 0-1 gracias al gol de Cristiano Ronaldo. El Málaga estaba apretando para buscar el empate y el Real Madrid no podía hacer más que encerrarse atrás. Era un momento de máxima tensión.
Rodeado de rivales, Duda agarró la pelota en la banda derecha y trazó la diagonal hacia la frontal del área, buscando un probable disparo con la zurda. Xabi Alonso y Pepe le salieron al paso. El medio del Málaga recortó hacia su izquierda y así tuvo que frenarse en seco.
Los tacos de Pepe acababan de contactar con la rodilla de Duda, su compañero en la selección de Portugal. La jugada continuó y el central siguió pendiente del balón mientras el centrocampista malagueño se quedaba en el suelo, revolviéndose con las manos en la pierna. Marcelo fue el más consciente de lo que había pasado y no tardó en acercarse a su rival para preocuparse por su estado.
Tras ser atendido, Duda la recriminó al árbitro que no hubiera señalado ni tan siquiera una falta. Y Martínez Munuera lo resolvió amonestando al futbolista del Málaga, que no paraba de mostrarse la rodilla. "No creo que sea merecedora de nada especial, son lances del juego", analizó Miguel Pardeza, director de fútbol del Real Madrid.
Mario Husillos, director deportivo del Málaga, no lo vió igual. "Cuando la televisión deja imágenes tan claras se comentan por sí solas", declaró. Más sorprendente fue lo que escribió la esposa de Duda, Arancha, en Twitter. "Se que muchos estáis molestos por la entrada de Pepe, pero sé que no ha sido intencionado y que adora a mi marido", tuiteó.
La brutal entrada de Pepe al jugador malagueño llega pocos días después de que el central del Real Madrid afirmara en una entrevista en Onda Cero que le duele la fama futbolista duro que le persigue desde la agresión a Casquero. "No es fácil para una madre escuchar como llaman asesino a su hijo. No cometí ningún crimen. No sé qué me pasó ese día ante el Getafe, todavía hoy lo intento entender pero no me lo puedo explicar", aseguró. Probablemente hoy tampoco sabrá cómo explicar su patada a Duda.Social Media for Business here
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