miércoles, 6 marzo 2013, 19:43Social Media for Business here
La expulsión de Nani centra, obviamente, los debates post-partido. Lógico, porque aunque algún árbitro amigo me ha comentado que le parece roja por considerar que su acción puede ser interpretada como "juego brusco grave", la jugada es tremendamente controvertida. A mi modo de ver, Nani levanta la pierna para controlar la pelota, y aunque impacta a una altura considerable con los tacos contra el cuerpo de Arbeloa, su gesto es de abrir el pie para amortiguar el balón con el interior -nunca le imprime una fuerza dirigida hacia el contacto con el rival-. Incluso los jugadores del Madrid no piden en ningún caso la tarjeta roja en el largo espacio de tiempo que transcurre entre el incidente y la expulsión -de hecho, Alonso le dice al colegiado que Nani está perdiendo tiempo, y esa parece ser su única objeción-. Sin embargo, y asumiendo que esta decisión condicionó tremendamente el partido -hasta ese momento el United sufrió muy poco-, hay algunos detalles más tácticos que no deberían escapar del análisis.
La omisión de Rooney, la sorpresa de Fergie más difícil de explicar
Algunos medios ingleses lo intuían, ya que Welbeck descansó ante el Norwich y Rooney, a diferencia de Van Persie, jugó los noventa minutos pese a que el encuentro estaba sentenciado. Sin embargo, nadie se atrevía a afirmarlo con rotundidad. Se comentaba que Ferguson ya no veía a su figura tan predispuesta a hacer un trabajo de sacrificio defensivo como otras veces en el pasado en duelos difíciles de Champions, y que meditaba apostar por el joven canterano, que es pura energía e intensidad en la presión. O sea: Welbeck era, según estas teorías, más adecuado para estar encima de Xabi Alonso, tapar la salida del Madrid y explotar los espacios que iba a dejar un rival necesitado de arriesgar. Este argumento puede aceptarse, aunque resulta extraño que incluso así Rooney no tuviera hueco en uno de los dos costados. Más si tenemos en cuenta que Giggs fue el elegido para jugar en la derecha y que a su edad no se le puede pedir un esfuerzo defensivo tan constante. Nani, que ha contado muy poco esta temporada, fue el otro extremo seleccionado: sorprendente, pese a ser quizá el más vertical de toda la plantilla, y por lo tanto muy apto también para el contragolpe. Pero si resulta difícil explicar la suplencia de Rooney también es porque, analizando la globalidad de sus virtudes, estamos ante el mejor futbolista de la plantilla del Manchester United. Rooney no es solo el desequilibrio en tres cuartos. Tampoco tiene como plus principal su compromiso. Es su lectura del juego, su toma de decisiones, su comprensión de los ritmos del partido, lo que lo hace indispensable. Ferguson pudo ganar incluso sin Rooney: nadie sabe qué hubiera pasado sin la expulsión de Nani. Pero incluso en ese caso, entender su decisión habría requerido un gran esfuerzo. Lamentablemente, el incidente de Çakir nos dejó sin rueda de prensa del escocés, por lo que no pudimos escuchar sus razones. Esperemos que pronto las cuente, porque uno se ha quedado, más allá de estar de acuerdo o no con la decisión, tremendamente intrigado.
La expulsión ofrece el contexto ideal para Modric: elimina al media punta
Sin Nani, Sir Alex toma una decisión lógica, pero que obviamente le debilita -cualquier decisión en ese momento le hubiera debilitado-. Welbeck deja de ser el media punta para pasar a cerrar la banda izquierda, que requiere ser tapada para ayudar a Evra en la marca de Özil y ante las caídas constantes de Higuaín a ese costado. De este modo, el United se ubica así desde la expulsión:
--------------------------------De Gea------------------------------
Rafael----------Ferdinand-----------Vidic-----------------Evra
Giggs------------Cleverley-----------Carrick------------Welbeck
------------------------------------------------------------------------
------------------------------Van Persie----------------------------
Alonso deja, pues, de estar tan exigido. Van Persie no puede desarrollar ese trabajo con tanta insistencia como Welbeck porque, habiéndose quedado como único punta, debe estar fresco para intentar aprovechar alguna contra. Carrick-Cleverley están demasiado ocupados cerrando espacios interiores, ya que Kaká es un media punta muy distinto a Özil: sale mucho menos de la zona de remate y baja a buscar la pelota al medio campo con menor frecuencia. Así que a menudo la acumulación de hombres en la frontal del área era tremenda: Kaká, Higuaín y Cristiano Ronaldo, que parte desde la izquierda para buscar posiciones de remate. Ante esas tres amenazas, el United no podía permitir que uno de los dos medios centros saliera a presionar la salida del Madrid, de modo que Cleverley y Carrick se juntaron mucho con Vidic-Ferdinand y dejaron espacio en la zona de creación blanca. Mourinho lo detecta bien e introduce a Modrid. Ojo, lo introduce en un contexto ideal: al lado de un medio centro creativo como Alonso y por detrás de un media punta que se mete menos que Özil en los asuntos de iniciación de juego. Es decir, en el contexto en el que siempre ha brillado más Modric (en el Tottenham, Alonso era Parker y Kaká era Van der Vaart; en la Croacia de 2008, Alonso era Niko Kovac y, mejor aún para Luka, no había media punta, sino dos delanteros). Así que el centrocampista balcánico podía jugar como le gusta: empezando la acción al lado del medio centro y terminándola en la zona del media punta. Dirigiendo, asumiendo, teniendo mucho la pelota. Y en un partido con un ritmo más bajo que aquellos que le pasaron por encima desde que está en el Madrid. Lejos de ese ida y vuelta de transiciones rápidas que tantas veces le supera. Más o menos, el Madrid tras el cambio de Modric se ubicó así:
-------------------------------Diego López-------------------------
Khedira------------Varane--------------Ramos--------Coentrao
----------------------Modric--------------Alonso-------------------
Özil----------------------------Kaká----------------------Cristiano
--------------------------------Higuaín-------------------------------
Entonces Modric brilla y el Madrid remonta. El United necesita dos goles y está con uno menos, pero Mourinho sabe que en Old Trafford todo es posible y que no hay club en el mundo con mayor tradición de remontadas que el gigante de Manchester desde que está Ferguson. El rival se iba a volcar con todo, así que lo más inteligente era protegerse. No olvidemos que el Madrid estaba defendiendo con Khedira de lateral y con Modric de segundo medio centro. Así que Mourinho adelanta sus posiciones tras el 1-2 y se asegura disponer de futbolistas con un comportamiento defensivo más interiorizado en las dos últimas líneas. Quita a Özil, mete a Pepe, y pasa a jugar así:
--------------------------------Diego López-----------------------------
Pepe--------------Varane-----------------Ramos----------Coentrao
--------------------Khedira------------------Alonso---------------------
Higuaín--------------------------Modric----------------------Cristiano
------------------------------------Kaká-----------------------------------
Resiste en los últimos minutos, con varias intervenciones de mérito de Diego López, y accede a cuartos de final. Ayudado por la decisión de Çakir, pero también tras algunos movimientos tácticos muy interesantes.Social Media for Business here
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