La primera victoria de Osasuna ante el Real Madrid se produjo en 1956 dentro de una semana decisiva en la historia del equipo blanco, un club que pocos meses atrás había conquistado su primera Copa de Europa. En el siguiente artículo repasaremos aquel épico encuentro, pero también nos detendremos en otros nombres como Villalonga, Kopa, Kubala o José Vila, el catalán que pasó a la historia del conjunto navarro tras ser el autor de los dos goles de aquella primera victoria rojilla.Social Media for Business here
El campo de San Juan era el siguiente destino. Desde que el Real Madrid había ganado en París la primera Copa de Europa en el mes de junio, las visitas del campeón se habían convertido en un acontecimiento que paralizaba cada ciudad que visitaba. Pamplona no iba a ser menos, y el viejo estadio se preparaba para vivir una jornada histórica.
El campo de San Juan quedaba situado a unos pocos kilómetros de la zona donde a día de hoy se encuentra el Sadar. Había sido inaugurado el 21 de mayo de 1922 con un partido entre el Club Atlético Osasuna y el Arenas Club de Guecho, y el Real Madrid lo visitó por primera vez en liga en abril de 1936, (pocas fechas antes del alzamiento militar que dio origen a la guerra civil española), aunque antes ya había jugado en copa.
El 1 de abril de 1934, más de dos décadas antes de la primera victoria local ante los blancos, el Madrid se impone 0-3 en San Juan a Osasuna en el partido de ida de los octavos de final de la Copa del Presidente de la República; marcan Leoncito, Emilín y Luis Regueiro. Bajo palos se muestra solemne e imbatible Ricardo Zamora, que ese mismo año será uno de los integrantes de la primera expedición de la selección española que juegue un mundial, el de 1934.
Pero volvemos a 1956, y a ese Osasuna que no arrancaba en el campeonato de liga pese a contar con uno de los entrenadores más respetados de la época, el eibarrés Baltasar Albéniz. El técnico de 51 años había pasado dos veces por el banquillo del Real Madrid: la primera etapa desde 1946 a 1948 en sustitución de Jacinto Quincoces, y una segunda en la que se hizo cargo de la plantilla relevando al británico Michael Keeping. Su paso por la disciplina merengue no fue prolífico en cuanto a títulos, pero Albéniz guardaba el arma para derrocar al campeón europeo en el futuro.
La víspera del 30 de septiembre de 1956 llega el Real Madrid a Pamplona. Los jugadores merengues son recibidos como estrellas, mientras en los bares y cafés de la ciudad se especula por cuántos goles vencerán los blancos a un Osasuna que cierra la tabla de la liga con 0 puntos en 3 partidos. Pero un hecho alterará la concentración merengue, ya que no es una semana habitual en Chamartín; esos días llega a Madrid Raymond Kopa.
Kopa, el sueño de Santiago Bernabeu
El francés había sido objeto de deseo del Real Madrid desde meses atrás. Por si cabían dudas, el club decidió apostar firmemente por su incorporación después de que Kopa interviniera en el homenaje a Luis Molowny el 31 de mayo de 1956, es decir, 14 días antes de que los blancos se proclamaran campeones de Europa por primera vez precisamente ante el Stade de Reims en el que militaba Kopa.
Aquel amistoso fue especial. El Vasco da Gama se enfrentó a un Real Madrid en el que se alineaba Di Stefano y el homenajeado Molowny, pero también actuaron reforzando al equipo futbolistas como Wilkes y Kopa...hasta Ladislao Kubala participó en ese encuentro vistiendo la camiseta del Real Madrid. Los blancos ganaron 4-2 y Raymond Kopa marcó los dos primeros goles; su futuro estaría ligado al club de Concha Espina en poco tiempo después de ganarse a los aficionados con una actuación de tanta dimensión.
Pero su fichaje no estuvo exento de polémica, ya que el equipo tuvo que solventar las restricciones impuestas para la contratación de extranjeros. En Septiembre de 1956 se modifica la ley, permitiendo que los clubes firmen dos jugadores españoles pero con la posibilidad de alinear sólo uno en el campo. La medida fue criticada por los rivales nacionales del Real Madrid, ya que entendían que las autoridades se habían apresurado a cambiarla para ayudar al Real Madrid en su lucha por repetir título en la Copa de Europa; competición que el galo sí jugaría pasara lo que pasara.
El interés por Kopa venía de lejos, siendo tan grande como las dudas que su participación en la liga generaban. Algunos rumores apuntaron incluso a la aparición del Barcelona en la pugna, como se puede apreciar en una nota aparecida en el diario ABC el 11 de abril de 1956.
También se habló de que Raymond Kopa podría quedar cedido en el Olympique de Marsella mientras se aclaraba el decreto federativo, o ser traspasado definitivamente al Milan. El francés fue presentado finalmente con los blancos durante la semana del Osasuna-Real Madrid, debutando con el club en un partido amistoso frente al FC Sochaux cuatro días más tarde; un encuentro sin historia en el que los de Villalonga vencieron 14-1 con 3 goles del debutante.
Lo cierto es que el Real Madrid llegó al partido de presentación de Kopa tocado en su orgullo tras la derrota de San Juan. Su estrella Di Stefano se encontraba en un periodo difícil tras la incorporación de Kopa, ya que muchos veían en el francés un recambio de futuro para el delantero argentino. Partidos como el jugado en Pamplona no ayudaban a hacer que las dudas desaparecieran, y de hecho la llegada del galo forzó la rápida nacionalización de Di Stefano por España para que pudieran jugar juntos.
La victoria de Osasuna
Osasuna ganó 2-0 con dos goles de un futbolista catalán, ex del Barcelona: José Vila Escuer, nacido en la localidad ilerdense de Alpicat en mayo de 1929. Vila llegó a debutar en primera división con el Barça en 1950 en el estadio de Atocha. Aquella jornada compartió delantera con jugadores de la talla de César o Basora, pero sería la competitividad que reinaba en el conjunto de Ferdinand Daucik la que le alejaría de un lugar en Can Barça. Salió del club e inició una carrera que le llevó a jugar en el Sabadell, el Melilla, Osasuna, Levante, Lleida y Balaguer.
Su gran partido como jugador profesional llego el 30 de septiembre de 1956 en San Juan, la histórica tarde en la que Osasuna venció por primera vez al Real Madrid. Los dos goles de Vila permitieron al conjunto navarro ganar su primer partido en la liga y obligaron a los hombres de Villalonga a reclamar con más insistencia la presencia de Kopa. Al final de 1956-57 el Real Madrid fue campeón de liga y de Europa con el francés jugando una gran parte de los partidos...Osasuna fue sexto y logró mantener la categoría por primera vez en su historia.
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