Álvaro Rubio es otro de los supervivientes de aquel 15 de noviembre en el que el Real Valladolid de Mendilibar conseguía derrotar al Real Madrid de Schuster. Ese día el mediocentro riojano formó el doble pívote con Vivar Dorado, tres años después de ese partido de nuevo intentarán repetir hazaña. El jugador se siente "contento de haber podido estar en ese partido, de vivirlo y con la ilusión de que se pueda volver a repetir".
Rubio es consciente de que es muy complicado conseguir la victoria, pero para él "todo es posible", y añade que "todos sabemos de la dificultad del partido que ellos no se pueden permitir muchos fallos más, nosotros vamos a hacer nuestro partido con mucha ilusión tanto para la afición como para nosotros. A disfrutarlo y a competir el partido".
En 2008 el Real Madrid llegó a Zorrilla en la jornada 11 con una sola derrota en Liga, ante el Deportivo, mientras que el actual ha perdido ya ante Getafe, Betis y Sevilla, Rubio asegura que "es otra época, antes tenían un buenísimo equipo, pero ahora quizás haya más diferencia entre Madrid y Barca y los demás equipos. Lo vimos el otro día que el Betis lo ganó y quizás podamos repetirlo".
Todos los integrantes saben que el partido es difícil, pero como señala el riojano "nosotros queremos pensar que sí se puede ganar". Y que en estos partidos no hace falta motivación extra es un hecho, Rubio indica que "motivados estamos todos, creo que el míster no tiene porque motivarnos. Un exceso de motivación también puede ser malo". Y con el apoyo de la afición será más fácil conseguirlo, el mediocentro afirma que "en estos partidos el campo presentará lleno o casi lleno, pero con eso los jugadores se sienten muy arropados en casa".
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