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1 - Deportivo de La Coruña: Aranzubia; Sílvio (Álex Bergantiños, min.25), Marchena, Kaká (Jesús Vázquez, min.58), Ayoze; Abel Aguilar, Paulo Assunçao; Bruno Gama, Valerón, Pizzi; y Riki (Nélson Oliveira, min.74).
2 - Real Madrid: Diego López; Arbeloa, Pepe, Carvalho, Marcelo (Khedira, min.57); Essien (Özil, min.57), Modric (Cristiano Ronaldo, min57); Di María, Kaká, Callejón; e Higuaín.
Goles: 1-0, min.35: Riki. 1-1, min.73, Kaká. 1-2, min.88, Higuaín.
Árbitro: Álvarez Izquierdo, del colegio catalán. Expulsó por doble amarilla, en la misma acción, a Di María (min.91). Además, mostró amarilla a Carvalho (min.17), Marcelo (min.54) y Callejón (min.66), por parte del Real Madrid; y a Pizzi (min.39), Abel Aguilar (min.63) y Ayoze min.71), por parte del Deportivo.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la vigésimo quinta jornada del campeonato nacional de Liga disputado en el estadio municipal de Riazor ante unos 30.000 espectadores.
El Real Madrid ha remontado ante el Deportivo un partido que durante muchos minutos fue perdiendo y ha logrado la victoria antes de medirse en la Copa del Rey ante el Barça en el Camp Nou. El colista de primera tuvo contra las cuerdas a un Madrid desconectado. Riki adelantó a los locales en la primera parte y, en la segunda, llegó la reacción blanca tras la entrada de Cristiano Ronaldo, hoy suplente, Ozil y Khedira.
José Mourinho, técnico madridista, decidió dar descanso a la mayor parte de sus estrellas. Sin Cristiano, Alonso, Ozil y Benzema, fue Kaká el que tuvo de nuevo una oportunidad. Y como sucede últimamente, el brasileño no la desaprovechó. Un tanto y una asistencia permitieron a los de Mourinho remontar en la parte final el encuentro.
La primera parte fue un quiero y no puedo de un Madrid mermado por las ausencias. Los blancos tenían en su mente el partido que deben jugar el próximo martes en el Camp Nou y se dejaron ir ante el colista. Esta desgana la aprovechó un Deportivo embravecido con el cambio de técnico, que apuraba las últimas opciones que le quedan para seguir vivo en la liga.
Los locales no llevaron el mando del partido, pero si lo controlaron. Fernando Vázquez se cubrió las espaldas y defendió con más efectivos de los habituales, y dejó a Riki como única bala de un revólver que disparó Valerón, un virtuoso de por vida.
Llegaba el Dépor en contragolpes trazados por el canario y forjados a fuego con la pasión del delantero. Avisó Pizzi desde la frontal, antes de que de nuevo Valerón buscase a Riki en la frontal. El madrileño soltó la pierna y engañó a Diego López. Su zurdazo se coló con violencia por el primer palo y dio ilusión a una afición muy necesitada.
La recta final de la primera parte fue un asedio continuo de los locales. Pizzi, tras jugada personal, probó suerte desde dentro del área. Su golpeo superó a Diego López y fue Marcelo, en la línea de gol, el que evitó el tanto in-extremis. Unos segundos después Riki encaró a Carvalho, lo rompió por la derecha y su chut lo repelió el cancerbero blanco con dificultades.
Desaprovechaba sus opciones el colista, con muchos problemas en defensa por las lesiones que se agravarían más durante el encuentro. Primero Silvio y después Kaká tuvieron que retirarse con molestias. En el Madrid el otro Kaká abroncaba a sus compañeros por su falta de movilidad.
La segunda parte fue otra historia. Desde el principio el Madrid salió a morder, a buscar al rival. El Dépor siguió con su arrancadas de manera esporádica, pero los minutos fueron desgastando a un equipo sometido a tanta presión.
Por contra, el Madrid fue ganando fuelle e intensidad. Sobre todo tras los cambios que introdujo Mourinho al poco de comenzar la segunda mitad. Ozil, Higuaín y Cristiano Ronaldo salieron al campo con el objetivo de superar un trámite que se les había complicado.
Los blancos plantearon un asedio constante hacia la portería de Aranzubía. Fue entonces, con más espacios, cuando apareció el mejor Kaká. Primero para marcar un gol típico suyo. Recibió en la frontal y sacó un latigazo con su pierna derecha para que el balón entrase pegado al palo de la portería del Dépor.
Fernando Vázquez veía como su equipo se deshilachaba por momentos. El Madrid corría a contrarreloj para lograr la victoria. El Dépor pedía clemencia. Sería un devoto como Kaká el que crearía el tanto del hundimiento local. El brasileño vio el desmarque de Cristiano a la espalda de la defensa. El balón pasó entre varios rivales antes de que el portugués cediese el tanto a Higuaín, en el segundo palo.
En el tramo final Di María volvió a protagonizar la jugada tonta de la noche. El argentino desafió al colegiado en dos ocasiones y ésta no dudó en expulsarlo por doble amarilla en tan sólo quince segundos.
Los deportivistas lloraban una nueva derrota que les sume en la depresión más profunda de las posibles. Colista, ahora está a nueve puntos de la salvación a falta de trerce jornadas para el final. El Madrid salvaba un trámite gracias a un invitado sorpresa, el brasileño Kaká, y ya piensa en el martes, donde se jugará media temporada ante el Barça.
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