Cristiano Ronaldo trata de alcanzar el balón en posición acrobática -Foto: lainformacion.com
Ni las runas, ni las borras del café, hubieran podido predecir el campeón de Liga de manera tan fehaciente como en los últimos años lo ha hecho el resultado del partido en el Reyno entre Osasuna y Real Madrid.
En los últimos seis años la ecuación ha sido sencilla, si el Real Madrid ganaba en el complicado campo osasunista, el título era para los blancos. Sin embargo, si los de la capital se dejaban puntos, el campeonato viajaba a la Ciudad Condal. Con el Madrid a 16 puntos de los azulgranas, la cábala dice que a los blancos les toca perder, pero los de Mourinho desearán romper la superstición del campo navarro.
La recondita estadística del Reyno de Navarra empezó en la temporada 2006/2007. Esa temporada el Real Madrid ganó de forma inesperada la Liga con Capello tras remontar una diferencia de cinco puntos con el Barcelona. Un gran sprint final del equipo blanco que esa campaña había ganado en Pamplona por un contundente 1-4.
En la siguiente temporada el estadio del Osasuna volvería a ser clave para decidir la Liga, esta vez de manera literal. Con el Barcelona a mucha diferencia y perdido en disputas internas, el Madrid llegó a Navarra en la jornada 35 con la posibilidad de proclamarse matemáticamente campeón, por delante del Villarreal. Los blancos vencieron 1-2 y consiguieron su 31ª Liga.
Llegó Guardiola al banquillo azulgrana y las tres ligas que vinieron a continuación fueron para el Barcelona. ¿Y qué pasó en Navarra? El Real Madrid no consiguió vencer. Dos victorias y un empate fue el balance de los de Chamartín en ese lapso de tiempo.
Con la Liga en su recta final llegó la pasada temporada el enfrentamiento entre rojillos y blancos en el antiguo Sadar. El Real Madrid llegaba al encuentro una diferencia de seis puntos con el Barcelona, si perdía se pondría a tres con tan solo siete partidos por disputar y teniendo que visitar a los azulgranas. Los blancos quisieron que la hipótesis de la victoria en el Reyno funcionase de nuevo, arrasaron por 1-5 a los navarros y sumaron, al final de la temporada, una Liga más a sus vitrinas.
Este sábado a las 20.00 la superstición rondará de nuevo el campo de Osasuna, todo indica que si los navarros ganan será el séptimo año consecutivo que el resultado pronostique el Campeón y si vence el Madrid puede ser el final de una estadística caprichosa.
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