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Busquets trata de frenar a Cristiano en el último Clásico | EFE
El Real Madrid está en periodo de ebullición. Los motivos son muchos y variados. Desde la crisis provocada por los resultados deportivos, hasta la posible salida de Mourinho pasando por las elecciones merengues del próximo mes de junio. El movimiento es palpable y deriva hacia el mismo punto: fichajes de renombre.
Florentino Pérez desea llevar al Bernabéu un bombazo con el que iniciar de forma deslumbrante su segundo mandato en su segunda etapa como presidiente merengue. Su deseo, tal y como contó Ecodiario.es el pasado miércoles, se llama Leo Messi.
Aunque parezca imposible, el presidente no se arruga. También parecía imposible lo de traer a Figo en 2000 y se consiguió, argumenta con frecuencia. Sin embargo, y pese a este optimismo crónico, Pérez sabe perfectamente que hay ciertos sueños que son casi inalcanzables y el de 'La Pulga' es uno de ellos.
Sin embargo, con Messi no se agotan las opciones de tratar de conseguir un 'Figazo' que deje tocado al Barça. De ahí que haya puesto sus ojos en un segundo hombre de equipo culé. Es español y clave en la evolución del propio Barça y 'La Roja'. Sergio Busquets gusta en el Bernabéu. Y se le sigue la pista por si fuera posible acometer un fichaje que sería mucho más económico que el de Messi.
Porque Busquets tiene una cláusula de rescisión que en la capital consideran 'ridícula' para las cualidades y capacidades del futbolista catalán. Apenas 80 millones de euros separan al mediocentro de la libertad, un precio que en el Bernabéu creen que sería asumible si algún día existiese opción de ficharlo.
Cierto, Busquets no es un Cristiano Ronaldo del fútbol. El portugués costó 96 millones, apenas 16 menos que costaría el blaugrana. ¿Por qué entonces asumir semejante dispendio por él? Sencillo: no hay otro como 'Busi' en su posición. Lo dice Guardiola. Lo dice Tito Vilanova. Incluso lo dice Del Bosque. Sergio es insustituible. "Si me pudiera parecer a alguno de los jugadores que ahora forman la Selección, elegiría a Busquets sin niguna duda", afirma el seleccionador con frecuencia.
Con él, la recuperación de balón está asegurada en todo momento, pero también la posesión y la salida limpia del esférico. Casualidades o no, Xavi e Iniesta han explotado como futbolistas de élite cuando Busquets empezó a ejercer en el pivote allá por 2008, fecha en la que ambos dieron el salto de calidad que todos esperaban de ellos.
En el Real Madrid ése puesto, el de mediocentro, está amenazado. Xabi Alonso sufre cierta acumulación de esfuerzos y el resto de alternativas no ofrecen el fútbol que sí tiene Busquets, así que, si se pusiera a tiro, ¿por qué no?
Para colmo, el jugador mantiene una magnífica relación de amistad con los españoles del equipo. De hecho, Mourinho ha usado en alguna ocasión esta amistad en contra de los internacionales, con acusaciones de 'teatro' hacia el futbolista del Barça.
Un panorama ante el que hay un problema. Y vaya problema. Busquets está, por ahora, más que satisfecho en el Barça. Pero en Madrid insisten, todo es cambiable. Forma parte de su optimismo crónico, ése que representa a la perfección Florentino Pérez, capaz de haber traído a la capital de España no sólo a Figo, sino a Zidane o Cristiano Ronaldo, jugadores que parecían intocables cuando el mandatario llamó a las puertas de sus equipos para ficharlos.
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