El Real Madrid asiste a la previa del partido de mañana ante el Atlético de Madrid en una especie de calma tensa, con todos los estamentos del club procurando no dar un mal paso que desate la ira de Mourinho.Social Media for Business here
Pero la situación de tensión generada por el técnico portugués es tal que cualquier asunto provoca debates. Por ejemplo, la fotografía del plantel comiendo en un restaurante sin la presencia de Mourinho, publicada el martes en las redes sociales de algunos jugadores.
"Disfrutando de una buena comida con mis compañeros y cogiendo fuerzas para la final del viernes. Vamos..!!", escribió Sergio Ramos en su Twitter, donde enlazó a la imagen en la que aparece junto a Casillas, Pepe, Fabio Coentrao, Cristiano Ronaldo e Higuaín. No están en la foto, pero sí en el restaurante, el resto de jugadores del equipo.
El acto generó diversas opiniones. Unos lo entendieron como un desafío al entrenador y otros advirtieron que se trata de una reunión tradicional en la historia del club ante momentos excepcionales.
Pero lo que nadie puede ocultar es que este Real Madrid no tiene ahora mismo un líder claro.
En otros tiempos, el presidente del club, Florentino Pérez, acudía solícito a enviar mensajes de arenga a futbolistas e hinchas, pero hace tiempo que el mandatario blanco renunció a los focos. Tomó la decisión de no aparecer ante los medios hace cuatro años, cuando inició su segunda etapa al frente del club.
Tampoco es Mourinho ningún líder en estos momentos después de los últimos acontecimientos y los rumores sobre su posible marcha del Real Madrid a final de temporada.
Su popularidad alcanzó mínimos históricos entre la hinchada blanca, que pasó de la idolatría al repudio en unas pocas semanas. Y las pocas veces que habla sólo genera incendios por sus guerras personales.
Por galones, el siguiente líder del grupo debería ser Casillas, pero Mourinho lo excluyó del once titular, por lo que no sirve como líder en una final de la Copa del Rey en la que volverá a ser suplente. En la misma situación están otros veteranos como Pepe o Marcelo. De tal forma que al Real Madrid sólo le quedan dos futbolistas capaces de asumir el liderazgo en tiempos en los que se habla de "autogestión" en el vestuario blanco. Son Sergio Ramos y Cristiano Ronaldo, ambos también enemistados con Mourinho, pero con demasiado peso deportivo como para prescindir de ellos.
En ausencia de Casillas, el sevillano asumió plenamente la capitanía del equipo y hasta propició el acercamiento entre el guardameta y Cristiano Ronaldo, separados tiempo atrás.
Pero el defensa camero acaba de salir de una lesión muscular y sólo ayer comenzó a entrenarse con el resto de sus compañeros. Nadie sabe en qué estado se encontrará para mañana, aunque parece que jugará.
Y queda Cristiano Ronaldo, un futbolista que en este año evidenció claros progresos en su relación con la hinchada, aunque todavía parece permanecer a la sombra de Casillas y Ramos en cuanto a peso específico, principalmente por veteranía.
"Florentino Pérez se muestra preocupado por el efecto que pueda tener la final de Copa en la percepción que los socios tengan de su mandato ante las elecciones presidenciales de julio. El presidente sabe que su suerte ya no depende de la gestión de Mourinho. Su apuesta final es por los jugadores", aseguró ayer el diario El País.
La situación del Real Madrid contrasta poderosamente con la que vive el Atlético de Madrid, agarrado a la figura sólida de su carismático técnico Diego Pablo Simeone.
No sólo eso, sino que la hinchada cuenta con varios referentes en el campo de juego como Diego Costa, Arda Turam o hasta un Radamel Falcao a quien nadie se atreve a abuchear a pesar de los rumores que lo sitúan fuera del equipo la próxima temporada. Aunque nadie sabe si eso será suficiente para romper con la racha de 14 años sin ganar un partido al Real Madrid.Social Media for Business here
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