Tras su paso por Palencia, Messina contaría con él. Sería el duodécimo pasajero. Mirotic había peleado por ello. Desde que pisó la ciudad castellano-leonesa, sus esfuerzos estaban centrados en volver: “Ese era mi objetivo. Volver y quedarme. No sabía exactamente lo que iba a pasar. Llegué a finales de mayo y el equipo jugaba el playoff. Durante el verano me fui a mi casa y estuve jugando con la selección. Estuve esperando la decisión que iban a tomar conmigo y al final me quedé y es lo mejor que me ha podido pasar”. Una decisión en la que estuvo presente Herreros: “Le dijimos que iba a ser jugador del primer equipo. Que quizás al principio no iba a tener el rol que le gustaría tener, pero que poco a poco, trabajando y entrenándose duro, le iba a llegar la oportunidad. Los pasos se adelantaron mucho. Su explosión fue brutal y estamos encantados porque tenemos, si no al mejor, a uno de los mejores cuatros de Europa”.
Messina tuvo que ver mucho con esa decisión. Y Mirotic lo agradece: “Con Messina tuve una relación muy buena. Era un entrenador al que le gustaban mucho los detalles y con bastante carácter. Yo me entrenaba muy bien y una tarde recuerdo que vino y me dijo: ‘Sigue entrenándote como ahora, que yo te voy a buscar una oportunidad para que juegues algún minuto’. Eso fue en octubre. Yo seguí trabajando duro y en diciembre me dio la oportunidad”. Al amparo del técnico italiano asombró a Europa, con varias actuaciones de crack, como contra el Montepaschi Siena en Italia, que le llevaron a ser premiado esa temporada con el Rising Star, que concede la Euroliga al mejor jugador joven de la competición. Ese día Messina normalizó la situación del canterano en el primer equipo: “Es uno más en la rotación”. Un partido en el que Mirotic anotó 16 puntos en 17 minutos, los últimos 13 en el cuarto final con un 4/4 en triples. Alberto Herreros fue testigo de esta actuación: “Me acuerdo. Como no estaba en el palco me permití el lujo de gritar y animar. Al tercer triple que metió seguido me miró y me guiñó el ojo diciéndome ‘hoy no te preocupes que estoy a tope’. Ahí cogió la confianza suficiente y la de sus compañeros para ser el jugador que es hoy”. Para Juan Carlos Sánchez Lázaro, director de la sección de baloncesto y presente ese día en el palco, su reacción posterior fue “muy normal, porque confiaba tanto en sus posibilidades que para él era normal”.
Ya tenía la confianza y el cariño de directivos y compañeros. Al fin y al cabo, el Madrid fue desde el principio una familia para Mirotic. Y muchas de las anécdotas y situaciones que ha vivido en el vestuario y fuera de él hablan de cómo era la relación con el equipo y con el cuerpo técnico. Por ejemplo, l"Mi primer coche fue el del delegado. Después cogía el de Kaukenas. Finalmente me compré uno"as idas y venidas de Niko en los coches de entrenadores y compañeros hasta que se sacó el carné, momento en que comenzó a utilizar el del delegado de la sección: “Mi primer coche fue el de mi delegado, Pepe Blanco (risas). Lo cogía cada mes y después cogí el Mazda de Kaukenas. Luego ya me compré uno para tener mayor libertad”. En ese coche sonaba y suena música española. Y es que Mirotic, que desde 2010 tiene la doble nacionalidad hispano-montenegrina, se siente muy de nuestro país. En ese coche va al cine o a ver a los equipos de la cantera, porque su compromiso con el club es tal que cuando descansa vuelve a sus raíces: “Fuera del baloncesto soy un tío muy tranquilo. Me gusta pasar mi tiempo libre estando en casa, dar un paseo con mi novia, ir a comer. Soy muy aficionado al cine y voy dos o tres veces a la semana. Cuando tengo tiempo libre también me gusta ir a ver los partidos de la cantera. Tengo muchos amigos, como Willy (Hernangómez), y me gusta ver los entrenamientos y los partidos”.
La llegada de Pablo Laso al Real Madrid supuso un paso adelante para él en su juego y en su rol en el equipo. “Con Laso ha cambiado mi situación un poco. Yo he mejorado como jugador y estoy teniendo mucha más responsabilidad. Es algo que me gusta y para lo que he trabajado siempre. Quiero ser alguien muy importante en el equipo. El cambio ha venido de mi trabajo cada día. Soy muy joven y esto tiene que ser solo el principio. Sé las cosas que tengo que mejorar y puedo ser mucho mejor jugador. Lo más importante es que estoy en el Real Madrid, que es el lugar perfecto donde puedo mejorar como jugador y el tiempo dirá lo que pasará”, afirma Mirotic. Su actual entrenador ya traía buenas referencias del montenegrino: “Ya le conocía. Había seguido su trayectoria en el Madrid y había hablado con sus entrenadores. La conversación que tuvimos fue de entrenador a jugador. Su crecimiento como jugador y como persona ha pasado por las fases positivas para ser un gran jugador. Me sorprendió para bien su seguridad y su confianza en su juego. Sabía que tenía un reto difícil y conoce perfectamente lo que es el Real Madrid y a lo que este club obliga. Hay veces que el trabajo con él es sencillo porque las cosas a intentar corregirle son muy claras. Es algo que él lleva y lo acepta bien y sus reacciones son muy normales”.
La relación entre jugador y entrenador va camino de cumplir su segundo año. Un tiempo en el que Laso ha podido comprobar el ADN del madridista: “Es un jugador ordenado para el gran talento que tiene. Su tiempo de cocción, de mejora como jugador, pasa por ir creciendo en aspectos que por su edad son normales que le cu"Va a acabar siendo una gran estrella. El talento natural lo tiene y lo trabaja", asegura Pablo Lasoesten más, como el conocimiento del juego, situaciones defensivas o lectura del rebote. Pero son aspectos que irá cogiendo con el tiempo. Estos detalles le irán haciendo mejor jugador, porque en otros su talento se lo pone más fácil”. El técnico blanco tiene la obligación de ayudarle a mejorar y pulirle para ser lo que unánimemente se piensa de él y Laso refrenda: “Va a acabar siendo una gran estrella. El talento natural lo tiene y lo trabaja. Nosotros estamos para ayudarle en esos aspectos de juego que aún le faltan, pero que por su edad es normal que aún tenga que mejorar. Para su edad es maduro en aspectos que a veces cuesta. Por ejemplo, en las sensaciones de lo que es un gran partido. Él, para la edad que tiene, lo lleva bien. Da la sensación de estar preparado para jugar grandes partidos a pesar de ser muy joven. Lo que más les cuesta normalmente a los jugadores de talento es defender. Creo que por sus características va a llegar a ser un buen defensor. Ya lo es, pero le cuesta prestar atención y mantenerla durante el partido”.
Uno de los peores momentos de su corta e intensa carrera profesional fue cuando se lesionó del tobillo en medio de los playoff de la pasada temporada. Su entrenador explica cómo vivió esa situación: “Se le veía preocupado. Yo notaba que estaba mejor y que quería ya entrar a jugar y aguanté un poco más a meterle y que él tuviera la sensación de recuperar un poco esa alegría. Después de un entrenamiento en Vitoria le dije: ‘Mañana vas a jugar’. Fue un poco esa sensación de que él necesita sentirse bien. A mí me gusta verle esa cara de alegría, de estar contento y a gusto, porque eso quiere decir que va a jugar bien. Ese ejemplo de la lesión en la temporada pasada creo que fue bastante representativo. La sensación de que él estaba bastante preocupado por su tobillo. Ahí hubo un momento en que le busqué para gastarle alguna broma y que se sintiera mejor y decirle de repente ‘prepárate, que vas a jugar’. Ahí siempre reacciona bien y por eso me gusta verle con la cara de concentrado pero a la vez de estar preparado y listo para jugar. Me gusta mucho verle disfrutar ganando. Es un chico que disfruta mucho con las victorias. Es muy alegre y muy espontáneo en las victorias del equipo. Necesita sentirse alegre para jugar bien”.
Si su primer entrenador le compara con Larry Bird, Laso ve cosas en su juego que le recuerdan mucho a un antiguo compañero suyo y muy conocido en la casa blanca: “Creo que tiene muchas cosas de Arlauckas. Esa sensación de facilidad en el juego ofensivo, de saber dónde va a caer un balón y estar allí para anotar, de buscar su mejor situación en el campo para quedarse abierto y poder tener un tiro. Da la sensación muchas veces de que no ha estado en el campo y lleva 14 ó 15 puntos. Dices: ‘¡Le han caído en la mano, qué suerte ha tenido!’, y no es así. Esa suerte es su talento. Arlauckas tenía eso. Si a esos puntos que te buscas les añades los que realmente te vienen, te hacen ser un gran anotador. Eso lo tiene Mirotic y se parece mucho incluso por la posición. De 4, que no es puramente interior y se puede abrir un poco. Y en el debe de ambos, aunque me oirá y me dirá que no es así, la mejora de su concentración defensiva permanente”.
El talento natural y el crecimiento del jugador blanco hacen que muchas miradas se centren en él, que muchos clubes ansíen tenerlo (amplió contrato hasta la temporada 2015-16). Juan Carlos Sánchez Lázaro lo confirma, pero también se muestra tajante en la respuesta: “El Real Madrid no es un club vendedor. Cuando nos preguntan por un jugador y, en este caso por Mirotic, nosotros no damos pie a la conversación y damos por cerrada la misma diciendo que tiene contrato y que ojalá se quede aquí toda su vida. Es un magnifico jugador y va a ser una estrella. Tiene una gran relación con todo el club, porque ‘ha nacido aquí’ y le hemos visto crecer”. Precisamente todos esos que lo han visto crecer coinciden en algo, en la enorme capacidad de sacrificio del jugador. Sánchez-Lázaro lo resume con una anécdota que pone de manifiesto cómo es la personalidad de Mirotic: “Fue en un partido que no estuvo acertado y falló algunos triples. En el avión de vuelta venía diciendo que si le podríamos abrir el pab"La palabra cantera es clave en mi vida. Recuerdo a cada persona que ha trabajado conmigo"ellón del Valle de las Cañas para hacer tiro una hora y media o dos”.
El pabellón no se abrió pero Mirotic, al día siguiente, llegó con las mismas ganas de mejorar que ha tenido siempre desde que se incorporó a la cantera, una etapa que considera clave en su vida. “La palabra cantera ha sido clave en mi vida. He tenido buenos entrenadores y recuerdo a toda la gente que ha estado trabajando conmigo. Los entrenamientos individuales que hacíamos a las 7:30 de la mañana. Todo. En la cantera se está haciendo un gran trabajo con los jóvenes y hay muchos más jugadores que han debutado con el primer equipo como Díez, Sanz, Hernangómez y seguro que salen más”. Sánchez Lázaro lo resume con una frase: “Mirotic es el crack de la cantera. Para el Real Madrid y para todos los chicos que vienen de abajo significa una persona a seguir. Es la referencia y la demostración que de una cantera también se puede sacar un jugador como él”.
Ante el elogio del director de la cantera, el hispano-montenegrino sólo puede contestar de una manera: “El Real Madrid me ha dado todo. Vine como un niño y he crecido como un hombre. Nunca me ha faltado de nada y me han tratado muy bien a mí y a mi familia. Este club y los aficionados siempre van a estar en mi mente y en mi corazón. Este club es mi casa. Tengo que aprovechar todo el tiempo que está aquí a tope y pasármelo bien. Quiero ganar títulos. Ya tengo la Copa y la Supercopa y ahora quiero la Liga y la Euroliga. Siempre diré que este es el mejor club para cualquier jugador”.
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