El Real Madrid de Pablo Laso continúa imparable y destrozó al Barcelona con una exhibición colosal ante su afición. Los azulgranas lo fiaron todo a su lanzamiento de larga distancia y no tuvo continuidad en su juego.Social Media for Business here
El Real Madrid de baloncesto tiene entre ceja y ceja marcar una época en el baloncesto europeo, hoy ante el Barcelona volvieron a ganar, ¡ya van 25 victorias consecutivas! y lo hicieron demostrando todo su potencial, con un juego alegre y muy conjuntando a diferencia de un Barça muy individualista y obsesionado con el lanzamiento exterior.
Empezaron los azulgrana con las ideas claras, no dejando correr a su rival e intentando imponer un ritmo lento, el único camino para intentar frenar a los blancos. A las canastas de Bourousis le respondió el buen juego colectivo del Barça que le colocó por delante por primera y única vez en el partido (7-11).
El recital estaba por llegar. El primero en castigar el aro culé fue Rudy Fernández, que firmó un formidable primer cuarto en el que anotó 11 puntos, bien secundado por un eficaz Darden. Rudy, Reyes, Mirotic y el Chacho se turnaron para castigar al Barça, demostrando la calidad del equipo de los de Laso.
La entrada de Sergio Rodríguez fue bien neutralizada en un principio por la gran defensa de Sada, pero la variedad de recursos de este Real Madrid parece inagotable. Los continuos rebotes ofensivos de Slaughter y el acierto anotador de Carroll no fueron más que el preludio de la exhibición de Reyes.
Felipón se disfrazó de Larry Bird y con doce puntos casi consecutivos, con dos triples incluidos, dio las primeras ventajas de importancia al Real Madrid, que cogió velocidad de crucero anotadora. La defensa del Barça fue superada una y otra vez (48 puntos en contra al descanso), y solo alguna acción aislada de Dorsey y de Marcelinho evitó que el partido quedara sentenciado antes del descanso.
El paso por vestuarios espabiló a los de Xavi Pascual, que decidieron apretar en defensa como única vía para poder tener opciones en el partido. Bien dirigidos por Marcelinho, cuyos uno contra uno y dos contra dos con Tomic castigaron en exceso a los blancos, los culés se pusieron a solo cinco puntos.
Pero las rachas del Real Madrid a veces parecen imparables, y en otro aluvión anotador se volvió a distanciar. Apareció por primera vez en el choque Mirotic y la defensa hizo el resto, provocando continuos contragolpes y canastas fáciles.
La máxima diferencia llegó (17 puntos) y el choque amenazó con romperse. Cuatro triples seguidos (dos de Papanikolau, Lorbek y Navarro) lo evitaron, en un tercer cuarto realmente espectacular (28-29). La defensa del Barça volvió a subir su intensidad en los minutos finales, llegando a colocarse a siete (81-74), pero un parcial de 6-0 (Mirotic y Llull) fue demasiado para los azulgrana, que pese a que lucharon hasta los últimos instantes, acabaron doblando la rodilla.
El Barça, muy verde todavía, no pudo con un Real Madrid que se ha convertido en una apisonadora de equipos. Los de Pablo Laso quieren ganar todos los títulos y todos los partidos, y si es diviertiéndose mucho mejor.
Real Madrid: Rudy (18), Mirotic (14), Darden (6), Llull (6) y Bourousis (13); Reyes (12), Rodríguez (15), Carroll (7), Slaughter (2), Draper (5) y Mejri.
Barcelona: Huertas (15), Navarro (17), Papanikolaou (6), Nachbar (4) y Tomic (10); Dorsey (3), Sada, Abrines (8), Oleson (10), Lorbek (11), Lampe y Pullen.
Parciales: 23-18, 25-18, 28-29 y 22-19.
Árbitros: Daniel Hierrezuelo, Carlos Cortés y Martínez Fernández. Sin eliminados.
Se colgó el letrero de no hay entradas en el Palacio de los Deportes de Madrid, que acogió a un total de 13.217 espectadores.Social Media for Business here
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