MADRID (Reuters) - La resistencia del Real Madrid se pondrá a prueba al máximo cuando reciban el miércoles al actual campeón, el Barcelona, en el partido de ida de semifinales de la Copa del Rey sin un número considerable de sus jugadores más influyentes.
Con la defensa del título de Liga prácticamente como una utopía, ya que se encuentran a 15 puntos del Barça que es líder, el entrenador de los blancos José Mourinho se ha centrado en la Copa del Rey y la Liga de Campeones como prioridades del club.
Sin embargo, la semifinal de Copa llega con el equipo plagado de lesiones y sanciones.
El capitán y guardameta Iker Casillas estará de baja unos tres meses después de pasar por el quirófano tras fracturarse un hueso de la mano, y el defensa Pepe todavía no ha vuelto después de operarse el tobillo.
Los defensas Sergio Ramos y Fabio Coentrao, y el delantero Ángel Di María, están sancionados para el partido de ida en el Bernabéu.
"Es un partido muy importante, complicado", dijo el principal anotador del conjunto merengue Cristiano Ronaldo después de marcar un triplete en la goleada del domingo por 4-0 frente al Getafe.
"Jugamos en casa, por lo que tenemos grandes posibilidades de hacer un buen resultado. Echaremos de menos a varios jugadores, jugadores clave, que son muy importantes para el equipo, pero esto no es una excusa", añadió el portugués.
"Tenemos que jugar bien porque sabemos que el Barça es un equipo fantástico".
Más allá de las bajas, estos últimos días han sido algo turbulentos para los campeones de Copa de 2011 después de que una información del periódico Marca dijera que los capitanes Casillas y Ramos habían amenazado con marcharse a menos que Mourinho fuera destituido.
El presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, tomó una medida poco habitual convocando a los medios de comunicación para una rueda de prensa en la que desmintió la historia, acusando al diario de mentir.
El impacto de perder a Casillas en un momento crítico de la campaña llevó al club a reaccionar rápidamente y fichar a un portero sustituto, Diego López del Sevilla, aunque probablemente será el suplente Antonio Adán quien ocupe su lugar el miércoles.
AMBICIÓN INSACIABLE
El Real Madrid ha tenido ventaja sobre el Barça en los enfrentamientos directos entre ambos de esta temporada.
Con un marcador global de 4-4 y por el valor doble de los goles fuera de casa, los blancos ganaron la Supercopa de España al inicio de temporada, y en Liga arrancaron un empate 2-2 en el Camp Nou.
Ronaldo le ha tomado la medida a su defensa y ha anotado siete goles en los últimos seis clásicos, y su rivalidad con el hombre que le ganó el título de Mejor Jugador del Año, Lionel Messi, continuará copando todas las miradas.
Después de que Ronaldo elevara su cuenta particular en Liga a 21 goles con un triplete el domingo, Messi fue aún más allá anotando cuatro dianas en la goleada por 5-1 que el conjunto azulgrana le endosó a Osasuna, situándose con 33 tantos.
"No creo que Messi necesite a Cristiano para motivarse a sí mismo, tiene una ambición insaciable", dijo Jordi Roura, asistente del entrenador del Barça, en rueda de prensa.
El Barça se impuso al Madrid por 4-3 en el marcador global eliminándoles en cuartos de final de Copa de la temporada pasada.
En la otra semifinal, el Atlético de Madrid, segundo clasificado en Liga, recibe al Sevilla el jueves en el Calderón esperando que su delantero Radamel Falcao se recupere de una lesión.
El Atlético, que cayó 3-0 frente al Athletic de Bilbao el domingo, perdió 2-0 contra el Sevilla en la final de Copa de 2010.
Link
0 comentarios:
Publicar un comentario