Madrid, 22 nov (EFE).- El Real Madrid recibirá mañana al Khimki de Rimas Kurtinaitis dispuesto a tomarse la revancha de la derrota en Moscú y a hacerse con el liderato en solitario del grupo A.
Ambos equipos llegan igualados a la cita del Palacio de los Deportes con un balance de cuatro triunfos y una derrota, pero mientras el Real Madrid perdió en su último encuentro, en la cancha del Panathinaikos, el Khimki llega con tres victorias consecutivas.
Desde que cayó frente al Cantú, el conjunto de Kurtinaitis ha crecido paulatinamente hasta tener en su mano la clasificación dentro de un grupo muy complicado.
"Sabemos de la importancia de este choque. El Khimki es un conjunto que tiene muchas alternativas en su juego", anunció Pablo Laso, entrenador madridista, que pidió el apoyo de la afición para un partido clave dentro de esta primera fase, sobre todo tras el 86-85 con el que se saldó el choque en la pista moscovita tras una gran remontada del cuadro blanco que no tuvo el refrendo final.
"El BC Khimki es un equipo muy peligroso que cuenta con un jugador muy importante, Zoran Planinic, que es capaz de anotar y crear juego. El equipo ruso tiene muy buenos tiradores en su línea exterior como Koponen, Rivers y Fridzon. Por dentro tienen jugadores muy grandes y muy fuertes y eso hace del Khimki un conjunto con muchas alternativas en su juego", explicó el técnico blanco.
Kurtinaitis consideró que el Real Madrid será más fuerte que en aquel encuentro. "Un factor importante es la vuelta de Sergio Llull, que es un jugador crucial", dijo el exmadridista, campeón de Liga con el Real Madrid en 1994.
"En los últimos partidos de Liga han ganado a Murcia, Bilbao Basket y Manresa, así que están en buena forma. Seguro que tratarán de tomarse la revancha por la derrota en la ida, pero nosotros lucharemos al máximo. Sabemos nuestras fortalezas y los chicos están bien, así que trataremos de hacerlo lo mejor posible para ganar", dijo.
El tercer base del equipo madridista, Dontaye Draper, aseguró que deben ser "muy consistentes durante todo el partido para tratar de conseguir la victoria".
"La concentración y la intensidad defensiva serán muy importantes, pero sobre todo tenemos que tratar de mantener una línea regular de juego durante los 40 minutos", dijo.
"Ellos tienen a muy buenos jugadores, como Planinic, que es el que dirige al equipo y el que marca su ritmo, pero creo que no podemos centrar nuestra atención en un solo jugador ya que nuestro objetivo tiene que ser el de hacer una buena defensa de equipo", apuntó.
Otro viejo conocido de la ACB, el pívot James Augustine, también manifestó que va a ser un encuentro "muy difícil" para ellos, "porque todo el mundo sabe que el Real es muy buen equipo", ante el que deberán "estar a un nivel muy cercano al primer partido para ganarlos de nuevo"
"Debemos defender muy bien y estar acertados en ataque", indicó Augustine, quien así mismo argumentó que no pueden centrarse en controlar a un determinado jugador del Real Madrid.
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