Madrid/Valencia. (EFE).- Real Madrid y Valencia abren el capítulo de cuartos de final de Copa del Rey, una eliminatoria que cobra máxima importancia para José Mourinho, con la competición copera convertida en vía de escape a su estado de depresión en Liga a 18 puntos del Barça.
La mala temporada del Real Madrid en la competición doméstica ha cambiado los objetivos. Se mantiene el sueño de la 'Décima' Copa de Europa y ha adquirido importancia la Copa del Rey. El camino al éxito no puede ser más complicado pero la plantilla madridista quiere convertirlo en argumento compensador de la mala Liga.
El Valencia en cuartos y previsiblemente el Barcelona en semifinales son dos opciones para la resurrección del Real Madrid en el mes de enero. Quitar un título al mejor Barça también curaría heridas y llenaría de moral al equipo de Mourinho para afrontar la eliminatoria de Liga de Campeones ante el Manchester.
Antes deberá superar a un Valencia en mejoría desde la llegada de Ernesto Valverde. Para ello el Real Madrid deberá cambiar el chip y la dinámica. En Liga no arranca y a domicilio mostró en Pamplona, con un empate sin goles ante el colista, la peor de sus caras y la falta de ambición. En Copa tuvo su dosis de sufrimiento para remontar la eliminatoria de octavos al Celta de Vigo.
Lo hizo gracias a un inconmensurable Cristiano Ronaldo. El portugués regresa para volver a liderar al equipo tras su ausencia en el Reyno de Navarra que tanto acusó en ataque un Real Madrid que sólo disparo una vez a puerta. También vuelve Antonio Adán y con él el debate de la portería. Mourinho no desvela quien jugará, si él o Iker Casillas tras dejar la puerta a cero en sus dos últimos partidos en los que regresó a la titularidad.
Si Adán se había convertido en el portero titular hasta su expulsión ante la Real Sociedad, jugaría la Liga y Casillas sería portero de Copa. En las manos de Mourinho está tensar aún más la cuerda o devolver la confianza a Iker. En defensa seguirán faltando los 'jefes' Pepe y Sergio Ramos. Ricardo Carvalho se perfila como titular y también Marcelo en su regreso a las canchas tras caer lesionado en octubre.
Por su parte el Valencia tratará de hacer valer la buena dinámica de resultados en la que se encuentra inmerso desde la llegada de Ernesto Valverde al banquillo y poder resolver la eliminatoria en Mestalla la próxima semana.
El principal problema en las filas valencianistas es la ausencia del capitán David Albelda, quien se retiró lesionado la pasada jornada ante el Sevilla y que se había erigido en el futbolista que da consistencia a la línea medular del equipo desde que Valverde se hizo con las riendas del Valencia.
A pesar de que es muy probable que el exmadridista Fernando Gago vuelva a la convocatoria -que dará a conocer Valverde tras la sesión de entrenamiento vespertina- después de un mes de baja por una lesión muscular, es el también argentino Tino Costa quien tiene todas las papeletas para suplir la ausencia de Albelda.
Por contra, el centrocampista Sergio Canales, otro exmadridista, no entrará en la citación, según dejó entrever Valverde en su rueda de prensa, ya que explicó que se trata de un partido muy exigente como para reaparecer, tras la doble grave lesión que sufrió el futbolista cántabro, quien la pasada semana recibió el alta médica.
El resto del once inicial podría ser el mismo que derrotó al Sevilla el pasado sábado, con la salvedad de la portería, donde Vicente Guaita se hará con la titularidad en detrimento del brasileño Diego Alvés. En la parcela ofensiva, el Valencia confía en el gran estado del también exmadridista Roberto Soldado, quien además se ha caracterizado por el acierto anotador ante sus ex equipos.
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