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Di María, ante el Manchester City, en el Santiago Bernabéu | Reuters
Ya lo contó EcoDiario.es este lunes. En el Real Madrid sólo hay 10 jugadores intocables. Son Casillas, Arbeloa, Pepe, Sergio Ramos, Marcelo, Xabi Alonso, Khedira, Özil, Cristiano y Benzema. El resto, es susceptible de ser vendido. Incluido Di María. El argentino se encuentra en la cuerda floja después de que su rendimiento en el Real Madrid haya dado mucho que desear. Esto, unido a su buen cartel, hace que desde Chamartín no se descarte su venta. Si el equipo blanco contratase a un futbolista de sus características, la salida podría producirse en el mercado estival.
Salida que en todo caso sería de altos vuelos. En Chamartín nadie duda de que el precio inicial por el 'Fideo' sería de 35 millones de euros. De esa cifra es imposible bajar. Es la cantidad que ha terminado costando un jugador que llegó por 25 millones de euros, pero al que las cláusulas por objetivos hizo que se disparase su precio unos diez millones de euros más.
A partir de ahí, la operación sería rentable. Por menos, no. Y eso siempre y cuando se encuentre a un sustituto que pueda superar la figura de un jugador que, tampoco lo niegan en Madrid, ha sido clave en las dos últimas temporadas. De hecho, el curso pasado, fue uno de los mayores asistentes del equipo junto con Özil. Pero también de los que más se lesionó. También de los que más protestó para conseguir mejorar su contrato.
De hecho, en el Paseo de la Castellana no gustó nada cuando, hace dos años, en plena Copa América, reclamó una subida de sueldo por su buen rendimiento. Cierto es que aquel primer año de blanco fue positivo, pero desde la entidad merengue entienden que se le subió todo demasiado pronto a la cabeza.
Otros jugadores como Pepe, aún habiendo demostrado más que él y siendo también protagonista de culebrones para renovar, tardaron más tiempo en reclamar una subida de sueldo. Él, Di María, no. Aquello no gustó. Como tampoco gustó su desprecio a un jugador del Alcoyano en los 16avos de final de la Copa del Rey. , comentó tras la entrada de un rival.
Hace un año renovó hasta 2018, como buena parte del equipo blanco. Así pues, su continuidad está asegurada cinco temporadas más.
Sin embargo, el deseo eterno del Real Madrid por hacerse con los servicios de David Silva ha hecho que nunca se haya convertido en uno de esos jugadores 'intocables', más ahora que ha bajado su rendimiento y que ha protagonizado algún roce con su entrenador por falta de actitud.
En el Bernabéu creen que, tarde o temprano, se volverá a la carga para fichar al mediapunta español. En tal caso, y de ser este verano, Di María tendría la puerta abierta para abandonar el club. Algunos dentro del club incluso creen que para que esa opción fuera posible, la de fichar a Silva, sería necesaria la venta de Di María para hacer caja y liberar una ficha que ronda los seis millones de euros.
Sea como fuere, se produzca la operación o no, lo que sí parece cierto es que Di María va a tener que ganarse la confianza del club para seguir en un equipo que empieza a quitarle el calificativo de estrella para ponerle el apelativo de 'estrellado'.
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