El Real Madrid continúa invicto en el Top-16 de la Euroliga al vencer al Unicaja por 64-72 tras remontar catorce puntos y con el base Sergio Rodríguez en un papel estelar, ya que fue el que marcó la diferencia en el último periodo tanto en la dirección como en la anotación.
El equipo malagueño, en crisis y con una mala dinámica, empezó nervioso, titubeante, con errores, que los aprovechó el Real Madrid, más tranquilo para situarse 5-8 en el minuto 3.
Pero a medida que iban transcurriendo los minutos, los jugadores dirigidos por el croata Jasmin Repesa apretaron en defensa y sacaron a relucir el sistema ofensivo (14-15, m.8).
El partido se había igualado. El conjunto madridista ya no estaba tan a gusto en la pista. Los pívots Nikola Mirotic, Felipe Reyes, Begic y Hettsheimeir anotaron dos puntos entre los cuatro, sufrían en ambas zonas y eran superados por Luka Zoric, Fran Vázquez y Augusto Lima, que firmaron en conjunto doce puntos.
El único que mantenía al Real Madrid era Rudy Fernández, ya que los demás estaban prácticamente ausentes, aunque con alguna colaboración de Sergio Llull y Sergio Rodríguez.
El éxtasis local llegó con tres triples consecutivos de Vidal, Urtasun y Panko, que situaron la máxima diferencia 34-25 en el minuto 18.
El Real Madrid lo estaba pasando mal por su actitud y la escasa colaboración de sus jugadores (36-30, minuto 20). El Unicaja mostraba sus mejores momentos, sin descanso, y forzaba a su rival en ataque y conseguía canastas importantes por parte del alero croata Krunoslav Simon, cuyo triple subió la diferencia a 46-32 en el minuto 22.
Pero el Real Madrid echó mano de orgullo y logró un parcial de 2-11 que, tras cinco minutos opacos del Unicaja, culminaron una pequeña remontada hasta el 48-43 del minuto 28. La defensa madridista había mejorado, pero aun así los cajistas seguían por delante.
El Real Madrid tiene una gran plantilla y siempre hay algún jugador que tiene un momento dulce. Esta vez fue el base Sergio Rodríguez, que con diez puntos en los primeros seis minutos dio la vuelta al marcador 54-61.
El Unicaja, muy justo y sin recursos, dejó escapar una amplia renta ante un conjunto madridista en el que los denominados jugadores pequeños -Rodríguez, Llull y Carroll- sentenciaron.
El Barcelona Regal sumó su tercera victoria en la Euroliga -la primera a domicilio- a costa del Besitas JK (59-73), al que no pudo doblegar hasta el último cuarto, cuando le dejó sin anotar más de cinco minutos y destrozó su defensa zonal con un parcial de 9-0.
Hace mes y medio, el Barça se plantó en el en el Abdi Ipekçi de Estambul, también sin Navarro. Entonces, el equipo de Xavi Pascual ganó de 30 y dejó a los de Erman Kurter en 48 puntos.
En aquel partido, Ingles (22 puntos) hizo de Navarro. Esta noche, en cambio, el Barcelona necesitó un poco de todos sus hombres en ataque para traducir su intensidad defensiva en victoria.
Arrancaron los catalanes un poco mejor que el Besiktas, lo que le permitió abrir la primera brecha en el marcador (4-10, min.7), gracias al buen inicio de Wallace y Tomic.
Los locales fueron recuperando terreno cuando Vidmar, que reaparecía tras varias semanas de baja, apareció en pista. Sin el acierto de los exteriores estadounidenses Jerrels y Christopher, el pívot esloveno se erigió en el salvavidas del Besiktas en estos primero minutos al anotar los ocho primeros puntos de su equipo. Pero la aportación de Mickeal y Jasikevicius permitió a los visitantes acabar el primer cuarto cinco puntos arriba (10-15).
El conjunto otomano salió mucho más concentrado en el segundo período. Liderado por el versátil Markota, le endosó a su rival un parcial de 12-4 y se colocó por primera vez por delante (22-21, min.14). A partir de ahí, la igualdad en el marcador fue la tónica hasta el último período, aunque el Barça casi siempre estuvo al mando en el electrónico.
Jasikevicius imprimió el ritmo necesario a su equipo, Lorbek se unió a la causa azulgrana y el Barça, serio, concentrado, se marchó al descanso con dos puntos de ventaja (32-34).
Jerrels, principal amenaza turca, despertó tras la reanudación. Entre él y Markota no dejaron que el Besiktas se descolgara en el marcador (48-51, al final del tercer período). Pero al inicio del último cuarto, la defensa catalana y un parcial de 0-9 que destrozó la zona 3-2 del Besiktas, rompieron definitivamente el partido.
A falta de cuatro minutos para el final, un triple de Ingles puso al Barça 13 arriba (49-62) y ahí se acabó el partido, pese a los intentos final de Jerrels y Ozel de ponerle emoción al partido.
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