Madrid, 12 dic (EFE).- El Real Madrid recibirá mañana al Olimpia Liubliana (20:45) en el Palacio de los Deportes con el objetivo de cerrar la primera fase de la Euroliga con el liderato del grupo A, para lo que necesita ganar y que el Khimki venza al Panathinaikos en Moscú.
El conjunto de Pablo Laso perdería el primer puesto aun ganando al campeón esloveno si los rusos no pueden superar al potente conjunto heleno, con el que tiene perdida la diferencia particular.
"Jugar el último partido de la fase regular en casa, delante de nuestros aficionados, es siempre una gran motivación", aseguró el entrenador madridista, quien aseguró que el Olimpia Liubliana "ha jugado mejor de lo que refleja su clasificación".
Los eslovenos son penúltimos del grupo con un balance de tres victorias y seis derrotas, una de ellas contra el Real Madrid en Liubliana por 76-89.
"Intentaremos ganar el partido para tratar de acabar primeros de grupo. Este es siempre nuestro objetivo y haremos todo lo que esté en nuestra mano para conseguirlo", aseveró Laso.
Saso Filipovski, entrenador del Olimpia, cuyo equipo está ya eliminado de la Euroliga, calificó al Real madrid de "gran equipo", "muy rápido y atlético", que dispone de "maravillosos anotadores y jugadores muy fuertes", y a su juicio capacitado para luchar por entrar en la fase final.
"Tenemos que aprender todo lo que sea posible de este partido. Jugar mejor defensa, sin altibajos. El Real Madrid hace un gran juego en casa y es realmente complicado ganarle. Será un partido muy difícil. Necesitamos cuajar la mejor actuación posible", apuntó el técnico del cuadro esloveno.
"Tenemos que jugar con acierto en ataque y agresividad en defensa", consideró Filipovski, quien apuntó que deben "parar a sus jugadores interiores con agresividad en la pintura".
El bosnio Mirza Begic, pívot del Real Madrid, debutó en la Euroliga con el Olimpia, sobre el que afirmó que "es un equipo joven que jugará más motivado de lo normal porque muchos quieren demostrar que pueden jugar bien" contra el cuadro madrileño.
"Será su último partido en la Euroliga y hará un esfuerzo extra para jugar tan bien como sea posible y dejar a sus aficionados con una sonrisa", apuntó Begic, quien valoró a los jugadores del Olimpia y destacó que el Real Madrid no deberá permitir a su rival impoenr su ritmo de juego.
El encuentro será dirigido por los italianos Roberto Chiari y Gianluca Mattioli y el estonio Aare Halliko.
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