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lunes, 10 de diciembre de 2012

El Real Madrid se mueve entre un ser superior (Florentino) y un ...

Este Real Madrid está llamado a hacer cosas grandes, afirmación que llama la atención viendo al equipo madridista a once puntos del Barcelona y con una trayectoria nada clara en la presente Champions, pero cuando sepan de qué hablamos se darán cuenta que los astros están de lado del club blanco. Por un lado un 'ser superior' y por otro un 'hombre de otro planeta'. Todo aclarado. 

Leyendo esto, muchos dirán que la Décima espera en el horizonte, pero visto lo que hay dentro de la entidad, tal afirmación se puede quedar corta. Años atrás, Emilio Butragueño calificó a Florentino Pérez como: "Un ser superior". Lo hizo a la hora de hablar de la capacidad del presidente madridista cuando encara cualquier tipo de gestión. El hoy director de relaciones institucionales jamás pensó que esa afirmación iba a tener tanta repercusión. De todo tipo, por cierto.

Ahora, años después, ha llegado otra que quizás supere la dicha en su día por el que fuera siete blanco. En esta ocasión, la frase en cuestión es obra y gracia de Jorge Mendes, hombre de pocas palabras y mucho negocio. El agente de Cristiano Ronaldo y José Mourinho entre otros, ha tenido la oportunidad de realizar el prólogo del libro 'Mourinho, el único', escrito por el periodista Manuel Pereira para la editorial Al Poste. En las líneas que Mendes ha dedicado a su entrenador favorito, el agente ha definido al técnico como 'alguien que no es de este planeta'. Todo aclarado.

La 'exclusiva' desvelada por Mendes, desconocida para casi todos los mortales, puede aclarar y explicar alguno de sus comportamientos, de sus maneras y da sentido a ese manual de entrenador que le ha llevado a triunfar en Oporto, Chelsea, Inter y según dicen los aficionados blancos, en el Real Madrid. Mendes sigue describiendo a Mourinho y habla de él como 'un genio, de alguien inigualable, capaz de ganar en campeonatos y países diferentes', normal siendo un extraterrestre, ¿no?

Lo cierto es que uno y otro, presidente y entrenador, siguen trabajando como si la tempestad ya hubiera pasado, como si el horizonte estuviera totalmente despejado. El técnico se encuentra tranquilo. Domina la situación y sabe que serán los resultados los que marquen el futuro, ya sea de este planeta o no. El jefe espera acontecimientos. En breve ratificará su confianza en Mourinho, pero sabe que serán los resultados los que marquen el desarrollo de los acontecimientos y el del deseo del portugués. Mientras, le sigue consultando cara a la próxima temporada. Lógico.



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