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Carvajal será uno de los primeros en regresar a la casa blanca | realmadrid.com
El próximo Real Madrid, el de la temporada que viene, empieza a perfilarse poco a poco. Más allá de los nombres propios que tendrá el equipo blanco, una realidad empieza a imponerse: apenas habrá movimientos o, mejor dicho, los que haya, no serán abundantes. Asunto diferente es si serán grandes fichajes. Todo apunta a que, efectivamente, habrá nuevo (o nuevos) galácticos en el Santiago Bernabéu.
Vayamos por partes. El Real Madrid ya tiene un bloque de diez jugadores intocables. Tal y como contó EcoDiario.es, un total de diez futbolistas de la actual plantilla tienen el cartel de intrasferibles y seguirán en la capital salvo sorpresa mayúscula. A esos nombres hay que sumar el de Diego López (fichado para ser el suplente de Casillas -Adán se marchará-) y cuatro-cinco caras nuevas procedentes de la cantera. Una de ellas vendrá de fuera del Santiago Bernabéu. Es Dani Carvajal.
El lateral derecho del Bayern Leverkusen volverá al Bernabéu por ocho millones tras ser vendido por seis el verano pasado. Su rendimiento en la Bundesliga está siendo más que correcto. Puede ser competencia perfecta para Arbeloa en su puesto.
A él se le unirán otros cuatro chavales del filial. Jesé es un fijo. Nacho y Morata, parecen candidatos obvios. Sólo falta por decidir un último jugador procedente del Castilla para ocupar ficha del primer equipo. Tampoco se descarta que sólo sean tres los canteranos ascendidos. Sea como fuere, el paso está dado. Las categorías inferiores volverán a tener presencia en el primer equipo.
Si a estos movimientos se le une el hecho de que no todos los trasferibles abandonarán la casa blanca, las cuentas indican que apenas habrá espacio para nuevos fichajes. Apenas dos o tres que en el Bernabéu quieren utilizar para traer al prometido crack (cuatro son los nombres que más se manejan por el momento) y, sobre todo, a un acompañante de Xabi Alonso en el centro del campo.
Götze, del Borussia Dortmund, gusta mucho, pero el Bayern de Guardiola ya ha puesto sus ojos en él. No es el único mediocentro creativo al que se le sigue la pista para reforzar un puesto cojo cuando el tolosarra abandona la medular. Modric cumple de forma intermitente en el puesto y nadie sabe si podría asumir la responsabilidad en caso de que sea necesaria una presencia prolongada por lesión del 14 blanco.
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