Zinedine Zidane mostró toda su magia con un golazo de antología.Social Media for Business here
El inicio del nuevo siglo no había sido auspicioso para los equipos denominados chicos en Europa, el Valencia dirigido por el argentino Héctor Cúper había llegado a dos finales consecutivas y ambas las perdió, una ante el Real Madrid y la otra ante el Bayern Munich.
En el 2002 llegaba el Bayer Leverkusen un equipo alemán que era uno de los grandes en el torneo local, más no tenía renombre internacional, en sus vitrinas sólo había la Copa Uefa de 1987-1988, sin embargo tenía un equipo mortal, con un volante que empezaba a dar que hablar en Europa, Michael Ballack.
Leverkusen contaban en sus filas con jugadores como Schneider, Bradnick y Neuville que junto con Ballack formarían parte del equipo que llegó a la final del mundial de Corea Japón 2002, así mismo estaba Yildiray Basturk, factor importante para que Turquía llegara al tercer puesto de ese mismo torneo.
Sin embargo al frente estaba el rey de copas europeo, los galácticos, los dirigidos por Vicente del Bosque, el Real Madrid con una volante casi perfecta, Makelelé, Solari, Figo y Zidane, quien ese partido demostraría su calidad.
Ambos equipos habían derrotado a rivales fuertes para llegar a la final en el estadio de Hampden Park de Escocia, los españoles dejaron en el camino al Bayern Munich y al Barcelona, mientras que los alemanes hicieron lo mismo con el Liverpool y el Manchester.
El encuentro fue dominado por los españoles desde el principio, Leverkusen les dio el balón y esperó su oportunidad para vencer el arco de César, y los españoles lograron el primer gol por intermedio del ‘ángel’ de Madrid, Raúl, que aprovechó un buen saque lateral y de suave toque venció a Butt a los 9 minutos.
Sin embargo el Leverkusen era un equipo que luchaba y fue en busca del empate y lo consiguió cuatro minutos después cuando el brasileño Lucio le ganó la posición a Hierro y de buen cabezazo venció a César.
El primer tiempo parecía que acababa igualado, hasta que llegó la magia que los elegidos tienen. Roberto Carlos recibió un pase de Solari y mandó un centro, la pelota fue cayendo lentamente, hacia el pie de Zinedine Zidane que de un espectacular remate de volea hizo el 2-1, un golazo el francés demostró su calidad y le daba su novena copa al Madrid.
Los alemanes sintieron la pegada y fueron con todo en busca del empate, y la situación parecía que les era favorable cuando César salió lesionado y entró el suplente del Real Madrid, Iker Casillas de 20 años, quien había perdido el titularato por una mala racha y luego de ese partido nadie lo movió de los tres palos.
Tres salvadas fundamentales en los descuentos, tres cuando más se le necesitaba, los alemanes presionaron pero no lo lograron, la copa estaba destinada al Madrid, y los equipos "chicos" sigueron esperando su oportunidad.Social Media for Business here
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