José Mourinho sigue a lo suyo, aplicando su esquema a rajatabla, intentando ser siempre el centro de atención para, supuestamente, liberar de presión a sus futbolistas. Horas antes del derbi entre el Real Madrid y el Atlético de Madrid mantiene la misma dinámica e incluso va un poco más allá. Se atreve a plantear un plebiscito a su afición y ha señalado el día, la hora y el lugar: sábado 1 de diciembre, 21:20 horas, Santiago Bernabeu.
"Si me quieren pitar, a las 21:20 estaré sobre el campo. Quien quiere hacerlo, allí estaré, solo", señaló retador el técnico portugués. El pasado martes, en el partido de Copa ante el Alcoyano, medio estadio le silbó mientras la otra mitad le mostraba su apoyo. Y, Mourinho, fiel a su estilo, lanzó luego un ruego al mismo público al que acababa de desafiar: "Durante el partido, que apoyen al equipo y al Real Madrid".
El entrenador de Setúbal, sin embargo, negó en su comparecencia ante la prensa en la previa del Real Madrid-Atlético de Madrid que lo que acababa de plantear fuera un reto. Y lo justificó utilizando como ejemplo a la afición del Betis: "Durante la semana estuvieron contra su equipo, su entrenador y el resultado (ante el Sevilla) y luego estuvieron en la grada animando". "Si me quieren pitar, lo aceptaré con humildad", concluyó.
Mourinho considera que atacar a su figura, al personaje que dice interpretar en beneficio de su equipo, se ha convertido en "el deporte nacional, por delante del fútbol, el tenis o la Fórmula 1". A él, sin embargo, no le preocupa demasiado, asume que va con el cargo. "Me aplauden y me pitan, es la vida en el fútbol", afirma.
Tampoco le importa mucho que sus jugadores le apoyen en público, como han hecho Casillas y Xabi Alonso esta semana. "Me da igual. Yo me quedo más con lo que han trabajando que con las palabras". Y descartó que el derbi de este sábado sea un partido a vida o muerte. "No me juego nada, sólo mi felicidad. Para mí, un partido es para disfrutar", explicó.
José Mourinho dejó también su habitual recado para los árbitros. Se acordó del papel de la tripleta arbitral en el duelo ante el Betis. "En aquel partido había tres equipos, uno estuvo muy bien y dos mal. Ante el Atlético me gustaría que dos estuvieran bien y uno mal y espero que los primeros sean el Real Madrid y el arbitraje", afirmó.
Sobre el Balón de Oro, en el que ha sido nominado finalista en la categoría de mejor técnico de 2012, el técnico luso dijo que no tenía "tiempo" para pensar en ello y aprovechó para dejar sendos recados a sus competidores. "Guardiola está de vacaciones y tiene tiempo para pensar en ello. Del Bosque también está de vacaciones porque no tiene partido hasta febrero. Yo tengo tres encuentros en una semana", zanjó.
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